martes, 28 de marzo de 2017

viernes, 24 de marzo de 2017

Sin excusas



Huir de un abrazo 
como el que huye de sí mismo.
Negarse una y otra vez.
Para no romperse y confesarlo todo.
Para no quedarse sin excusas.

Huir de un abrazo
para no tentar a la suerte.
Repetirte mil veces que no, hasta creértelo.

Negarme mil veces, hasta creérmelo.



@pennylanebcn
2017, Invítame a vivir,

jueves, 23 de marzo de 2017

Puzzles - micropoema


Puzles que navegan en mi cabeza.
Ovillos que envuelven y convencen.
Canciones que me arrastran a la certeza.

Cortaste una rosa - Henrik Nordbrandt


Cortaste una rosa mientras yo dormía
y la pusiste en el vaso de mi mesilla
encima de una carta de despedida.
Tiré la rosa en una barca de remos
y dejé que se la llevase la corriente
allí desapareció bajo los sauces llorones
en un lugar donde el río formaba un meandro.
La barca se llevó la rosa.
La corriente se llevó la barca.
El río se llevó el puente
donde las mujeres se paseaban por la tarde
cuando el sol teñía de rojo al río.
A ti se te llevó el puente.
La barca era de un verde sucio
vieja, estaba llena de agua, medio podrida
y se llamaba Amalie II.

Y así pasan las cosas, yo ahora vivo
solo, en una habitación rosa, en un paisaje azul
y añoro con la misma fuerza
eso que hay detrás de las montañas brumosas
yeso que se esconde de sí mismo
dentro de mí
entre las palabras de tu carta.

Existir es saber.
Viajar es sufrir.
Lo primero no lo quiero.
Lo segundo es superior a mis fuerzas.

lunes, 13 de marzo de 2017

AGUJERO BLANCO, CIMIENTO Y FLOR







Puedo verte al asomarme al balcón.

Decidido, con pasos de cimiento y flor,

con pancartas y la sonrisa de los que no se resignan.



Te encuentro, agujero blanco,

en los versos de Neruda,

al paralizar un desahucio,

al defender lo que es de todos.



Me acunas, marea,

que borras poco a poco

estas huellas de un pasado sin futuro.



Caminando, puedo escucharte,

reclamando lo que nos pertenece.

Primavera, que floreces

a cada paso, a cada grito.



Floreces. Y con tu luz alumbramos

cloacas del miedo de despacho.

Floreces. Y a tu paso,

curas democracias enfermas.

Tus manos, tu voz,

la palanca con que sacudir escaños.

Puedo escucharte, en cada escuela,

en cada hospital,

en cada constitución saqueada.



Me acunas, marea.

Tú, que borras poco a poco

estas huellas de un pasado sin futuro.

Me acunas, atrapasueños

de conquistas sin vencidos.




Puedo verte. Puedo escucharte.

Con tu caja de herramientas y tus gafas de lejos.

Puedo verte. Puedo escucharte.

Enseñándome. Llamándome.






Boceto del poema: 2013