viernes, 18 de marzo de 2016

National Geographic, de Gonzalo del Pozo



Un día encuentras barcos
en el fondo
de tu vida
sin saber cuándo se hundieron.
Esto es la memoria.
Por suerte para los peces
-según leí en el dentista-
lo olvidan todo a los tres segundos.
Eso es la rutina.
Pero los grandes arquitectos del mar,
los corales, tan solo crecen unos centímetros al año.
En ellos duermen estrellas,
viven y mueren
todos los colores.
Eso podría ser amor.
Y aún así,
lo único que sé de cierto
-y no soy buzo profesional-
es que esos barcos,
todos los peces
y el coral del mar
aprenden a convivir
en el fondo.